Parece que fue ayer y esta niña ha crecido. Ángela Gonzálvez ha sido siempre la imagen del pundonor, tanto en la pista de juego como fuera. Hoy, convertida en una profesional de la publicidad, juega en el equipo senior femenino con su carácter luchador de siempre. Y aporta su granito de arena haciendo carteles publicitarios para el CBI y su colaboración. Como siempre, Ángela es … un verdadero ángel.
CBI: Buenos días, Ángela, coméntanos: ¿Cuáles son tus aficiones?
AG: Desde bien pequeña siempre he practicado deporte, teniendo como preferencias el baloncesto y las artes marciales. Ahora he ampliado el abanico y también le dedico tiempo a actividades como la fotografía, el buceo, el airsoft o el senderismo.
CBI; ¿Desde cuándo juegas en el CBI?¿Por qué?
AG: Cuando tenía 11 años empecé a jugar; cierto es que nunca destaqué por ser especialmente coordinada, especialmente rápida, especialmente acertada o especialmente nada. Pero con el tiempo y de la mano del que fue mi entrenador durante muchos años, Esteban Bru, conseguí ser una jugadora constante y esforzada. Siempre he dicho que soy una jugadora de intangibles, me gusta motivar a mi equipo y jugar para ellas más que para mí, ya que soy consciente de las limitaciones y virtudes de todas las que formamos el grupo.
Cuando llegue a junior de segundo año, cambié de club para jugar en un senior y no me fue del todo mal, pero termine quemada y decidí que la siguiente temporada solo jugaría en la universidad, dónde nos quedamos a las puertas del campeonato de España.
Tras esa temporada y por motivos personales, dejé el baloncesto y pensé que jamás volvería. Entonces recordé una frase de mi amigo y entrenador del Club Baloncesto Ilicitano Lucio Cobo: “El baloncesto suele acabar a los 18”, y es cierto que con el comienzo de la vida adulta, el baloncesto pasa de ser una prioridad a ser una opción.
Pero eso cambió al principio de está temporada, cuando el CBI y unas pocas decidieron moverse y crear el equipo que ahora somos. Gracias a todas ellas recuperé una ilusión y puesta a volver a jugar, ¿dónde mejor que en casa?
CBI: ¿Qué destacarías del CBI y que mejorarías?
AG: La familiaridad, desde bien pequeña siempre tengo el recuerdo de Guerrero o Berbegal metiéndose a jugar con nosotras, como uno más y enseñándonos todo lo que podían. Y siempre que teníamos partido había alguien de la directiva viéndonos, animándonos o para lo que nos hiciera falta.
Respecto a las mejoras, sé que cada vez somos más y cuesta tenernos a todos contentos, pero en ocasiones las chicas nos sentimos un poco de menos cuando vemos que en el reparto de pistas siempre nos toca “el parque” y a los chicos no. También tengo en cuenta que nuestro equipo se hizo a última hora y era lo que nos tocaba, pero de cara a nuevas temporadas estaría bien conseguir la equidad.
CBI: ¿Cuál es tu valoración sobre la atención que recibes tanto en el aspecto deportivo como personal en el CBI?
AG: Todas las temporadas con el CBI me he sentido muy bien acogida en todos los ámbitos, más de una vez el entrenador ha sido nuestro paño de lágrimas y amigo para todo, como uno más. Además el respaldo emocional de todas las compañeras cuando alguna pasaba por malos momentos siempre ha sido increíble.
Durante mis años en el CBI, no solo he recibido una educación deportiva, sino que también se me ha educado en valores como la honestidad, el juego limpio, el compañerismo y la buena fe.
CBI: ¿Cómo te encuentras en el CBI?¿Estás contenta, aprendes, haces amigos…?
AG: Me encuentro genial, he recuperado viejas amistades y hecho otras nuevas. En cuanto al aprendizaje, doy gracias al pedazo de entrenador que hemos tenido esta temporada, Moisés . Este hombre es la paciencia en persona, no ha hecho más que buscar técnicas que se adaptaran a nosotras y explicarnos una y otra vez todo aquello que no entendíamos.
CBI: Para finalizar, ¿le recomendarías el Club Baloncesto Ilicitano a otras personas?
AG: Claro, como he dicho antes aquí además de la educación deportiva, se da una educación en valores, y eso es raro de ver hoy en día.
