Gran eliminatoria entre CBI y Alcàsser que se ha decidido con una extensa victoria para los ilicitanos.
En la ida los nervios, la precipitación y el factor pista provocaron un resultado bajísimo, en el que los dos equipos lucharon y dieron todo en defensa. Perdimos una ventaja de 12 puntos en unos 3 últimos minutos de acierto locales, más de corazón que de juego, pero donde entraron todos los tiros y a nosotros ninguno (mucho fallo bajo aro tonto).
En la vuelta esperábamos un partido durísimo y en el que el rival vendería cara su piel. Pero, quizás por esta motivación, el equipo salió rompedor y un parcial de 17-2 en los primeros 7 minutos(30-8 en el 15) presagió la tónica de los restantes 33. Sólo un 0-6 gracias a grandes acciones de su número 8 acercaron el partido a 18 antes del descanso. Pero fue un espejismo, y tras recuperar la concentración conseguimos volver a la misma línea y acabar el partido.
Quizás lo mejor fue la participación positiva de todos los jugadores del equipo (todos dispusieron de bastantes minutos), especialmente en el partido de vuelta.
Lo peor, casi con seguridad, que los últimos 5 minutos se convirtieran en un intento de faltas duras y malintencionadas por parte del equipo visitante, y gestos feos a la grada; que es comprensible por la frustración, pero que un entrenador debe tener la cabeza fría y no debe permitir (y más en categorías no-senior).
Ahora a pensar en Calpe, un equipazo con el que disfrutaremos de dos partidazos, con toda seguridad. Y, para vosotros, como siempre os pido: humildad, trabajo duro y respeto, pero sin miedo a nada, con ganas e ilusion; con nada que perder y todo por ganar. Nosotros, con nuestro trabajo, somos los que decidimos el límite.
